Nuestra intuición

Algunas de nuestras acciones no son visibles para otros, y los resultados solo aparecerán en el futuro, pero internamente sabemos lo que estamos haciendo. Nuestro verdadero yo, nuestra intuición, nos está guiando. Si somos conscientes de esta guía–estando en contacto con ella, escuchándola– entonces no debería haber ningún problema para decidir qué hacer. No debería haber ningún problema en comprender rápidamente la situación, elegir la acción correcta, mantener la acción correcta momento a momento.

–Ja An JDPSN

¿Por qué no practica Zen más gente?

Una vez le preguntaron a nuestro gran maestro Man Gong Sunim: «¿Por qué no practica Zen más gente?» y él respondió «Todos quieren algo bueno, pero la mayoría de la gente no entiende que cuando obtienes algo bueno también obtienes algo malo. Si lo entendieran, todos practicarían Zen».

Nuestra vida no trata de conseguir cosas buenas y evitar las malas. Se trata de encontrar la manera correcta de utilizar aquello que aparece. Las cosas buenas vienen, las utilizamos para ir por el camino correcto; viene lo malo, lo utilizamos para ir por el camino correcto.

–Maestro Zen Dae Bong

Nada identifica a un Buda

La iluminación no es especial, significa solo dejar ir, justo ahora. Por eso lo llamamos «No sé». No sé significa no estar apegado al pensamiento. En realidad, la cosa más simple del mundo es obtener la iluminación. Como piensas que es complicado, nunca lo consigues. Eso solo es tu pensamiento. Suelta el pensamiento, eso es todo. No es complicado. Por eso Buda dijo en el Sutra del Diamante «nada identifica a un Buda» eso significa que Buda no tiene ninguna característica especial. Buda también dijo «no hay una fórmula para conseguir la iluminación». Lo que significa que la iluminación no depende de ninguna técnica. La técnica solo apunta una dirección. Y todo esto viene del hecho de que ya eres «eso».

–Maestro Zen Dae Kwang

Las enseñanzas del Maestro Zen Man Gong (parte 4)

¿Qué soy? La necesidad de encontrar tu verdadero Yo

16. La Verdadera naturaleza es un cuerpo diamantino, indestructible que no puede morir. Más allá del tiempo, tiene una vida sin fin. Cada vida y cada muerte de la forma corporal es tan simple como el hecho de cambiarse de ropa; la persona verdadera es capaz de quitarse o ponerse la ropa de la vida y la muerte libremente.

17. El conocimiento que obtienes al ver y escuchar no te llevará a alcanzar tu verdadera naturaleza. Pensar en la verdadera naturaleza ya no es la verdadera naturaleza.

18. La verdadera naturaleza solo se puede encontrar «antes del pensamiento» porque el mundo «antes del pensamiento» contiene toda la existencia y ya está completo.

19. Si una persona alcanza la iluminación final mientras tiene al Buda como meta, se encontrará que él mismo es el Buda. Esto significa que debes encontrar la verdadera naturaleza dentro de ti.

Del libro, The Teachings of Zen Master Man Gong.

Luz mental

Si enciendes la luz, todo se ilumina y puedes ver a las personas enfermas, las felices, puedes verlo todo. Sin luz no puedes ver nada. Con el mundo pasa lo mismo, lo que marca la diferencia es solo si tenemos luz o no. Si hay oscuridad, aparecen las luchas entre las personas y el sufrimiento. Todo el mundo grita: «¿Dónde está la puerta? ¡Quiero salir!» Pero con la luz encendida ¿por qué tendría que pelear la gente? «Oh, aquí hay una puerta, aquí un camino; una persona puede ir allí, otra puede ir por allá.»

¿Cómo salimos de este océano de sufrimiento? Con luz mental. Cuando aparece, puedes salir por la puerta y bajar por el camino. La luz mental transforma el océano de sufrimiento en el océano de Dharma. Todos se vuelven armoniosos, como niños felices. Todos obtienen felicidad verdadera e inmutable. Algunos lo llaman «luz pura» o «nirvana». Si te apegas al nirvana tendrás un problema. Pero si alcanzas la correcta función del nirvana, puedes salvar a todos los seres de este océano de sufrimiento.

–Maestro Zen Seugn Sahn

Las enseñanzas del Maestro Zen Man Gong (parte 3)

¿Qué soy? La necesidad de encontrar tu verdadero yo

11. Todo es verdadera naturaleza (gran «Yo»). Si aplicas tu esfuerzo a otra cosa que no sea encontrarla, incluso el esfuerzo más pequeño, es un desperdicio.

12. Todos tenemos tres cuerpos: un cuerpo físico, un cuerpo de karma y un cuerpo dharma. Para un verdadero ser humano, estos tres cuerpos no están separados, sino que funcionan como uno solo.

13. Toda acción se origina en el cuerpo dharma. Como el cuerpo dharma no está separado del cuerpo físico o del cuerpo del karma, todos los fenómenos también están más allá de la vida y la muerte.

14. El lugar más allá de la vida y la muerte incluye tanto a los seres sensibles como a los no sensibles. Por lo tanto, todas las armas del universo no podrían destruir la verdadera naturaleza de ni siquiera una brizna de hierba.

15. En nuestro mundo se enseña mucho acerca de cómo encontrar y comprender nuestra verdadera naturaleza. Todas estas enseñanzas son solo acerca de la comprensión del pequeño «yo» desde el punto de vista de nuestro karma. Nuestra verdadera naturaleza es inconcebible y está más allá de la imaginación.

Del libro, The Teachings of Zen Master Man Gong.

Akhila Katuri

No te preocupes por todo este karma

A veces vemos nuestro camino como si fuera una línea y esperamos que seguir por este camino sólo signifique mejorar, ser más feliz, tener más alegría, tener una vida más exitosa.

Pero esta no ha sido nunca mi experiencia. No así; no es un movimiento lineal. Siempre nos movemos dando vueltas. Tenemos vida y muerte, y tenemos samsara. Subimos, y bajamos. Tienes éxito; tienes una buena meditación. Lo podemos ver durante una semana. Cada día, cada momento de sentarnos: un momento estás contento y te sientes bien. «Mi meditación es genial, tan clara, tan fuerte.» Y al momento siguiente, incluso en la próxima ronda de sentarse, a veces a los cinco minutos siguientes, «¿Qué ha pasado?» Algún miedo o tal vez la rabia aparecen de la nada. Pero si os sentáis el suficiente tiempo, no le prestas tanta atención. Todo está cambiando, cambiando… tu pensamiento, tu sentimiento, tus emociones cambian. No te preocupes por todo este karma que va y viene; lo que es más importante es volver a antes del pensamiento, a nuestra mente original, una y otra vez. Practicamos el soltar y practicamos el recomenzar una y otra vez ¡Qué privilegio!

–Maestra zen Bon Shim

Las enseñanzas del Maestro Zen Man Gong (parte 2)

¿Qué soy? La necesidad de encontrar tu verdadero yo

6. Si grito el nombre de alguien e inmediatamente responde, «¡Sí!» Esa es la verdadera naturaleza. La verdadera naturaleza no tiene nacimiento ni muerte. No puede quemarse, mojarse o cortarse con un cuchillo. Es completamente libre y sin obstáculos.

7. Al igual que el prisionero grita mientras es arrastrado por un caballo, las cadenas de karma nos arrastran por el camino del sufrimiento. Repetidamente, seguimos los ciclos de la vida, la enfermedad, la vejez y la muerte. Solo tu espada de sabiduría puede cortar estas cadenas.

8. No importa lo bien educado que estés o lo respetado que seas, si no has resuelto la gran cuestión de la vida y la muerte, eres como una persona que se ha perdido la cabeza.

9. Cuando nació el Buda Sakyamuni, señaló con una mano hacia el cielo y con la otra hacia el suelo y dijo: «Entre el cielo y la tierra, solo «Yo» soy santo». Este «yo» significa la verdadera naturaleza.

10. Todo el mundo tiene naturaleza de Buda (naturaleza verdadera) pero no pueden convertirse en Buda porque no se entienden a sí mismos.

Del libro, The Teachings of Zen Master Man Gong.

Las enseñanzas del Maestro Zen Man Gong (parte 1)

¿Qué soy? La necesidad de encontrar tu verdadero yo

1. Se dice que el ser humano es la más preciada de todas las cosas porque puede alcanzar su verdadera naturaleza.

2. La verdadera naturaleza significa libertad total, responsabilizarse de la vida de uno mismo; pero los seres humanos rara vez son libres en cualquier momento o lugar. No pueden controlar sus vidas porque su pensamiento equivocado (pequeño «yo») se convierte en el jefe, mientras que su verdadera naturaleza es solo el esclavo.

3. El pequeño «yo», pensamiento ilusorio, es el fruto de la verdadera naturaleza. El pensamiento equivocado surge del deseo egoísta. La verdadera naturaleza (mente clara o mente bodhisattva) es la mente correcta, que no tiene principio ni fin; no tiene existencia ni extinción; sin embargo, no le falta nada.

4. ¿En qué se diferencia un ser humano que ha perdido de vista su verdadera naturaleza de un animal que solo persigue instintivamente el sexo y la comida? No importa cuán grande o famoso seas, si no alcanzas tu verdadera naturaleza, eres como una molécula, sujeto a los cuatro tipos de nacimiento y muerte y los seis reinos de la existencia (samsara).

5. En nuestro mundo, la mayoría de la gente vive junta, compartiendo un estilo de vida, siguiendo su karma sin plantearse nada. Sus vidas simplemente ocurren, sin dirección. Inconscientes de lo que viene. Cuando llega la muerte, están ciegos a lo que les espera.

Del libro, The Teachings of Zen Master Man Gong.

La mente nada

«¿Cuál es el propósito de la vida?» le pregunté a mucha gente mayor en el hospital o «¿Qué sacaste de la vida?», muchos contestaron: «Nada». Quizás tengan un buen trabajo, una buena familia, una buena esposa o esposo, pero estas cosas no pueden ayudarlos ahora. Quieren algo que no pueden tener, y lo entienden, es por eso que dicen: «Nada». Esto es comprender «nada». Pero la comprensión no puede ayudarlos y por eso sufren.

Zen significa alcanzar esta mente nada. El Buda dijo: «Si mantienes la mente clara momento a momento, obtendrás felicidad en todas partes.»

El Zen es alcanzar esta mente «nada» y utilizarla. ¿Cómo puedes utilizarla? Zen significa convertir esta mente «nada» en una mente de gran amor. La mente «nada» significa que no hay «yo, mí, mío», no hay obstáculo. Así, esta mente puede cambiar a la mente de Gran Compasión, la mente de la acción para todas las personas. Esto es posible.

La mente «nada» no aparece, ni desaparece. De este modo, momento a momento, es posible mantener tu situación correcta. Entonces tu mente es como un espejo: cuando estás con tus pacientes, solo conviértete en uno con ellos. Entonces es posible ayudarlos. Cuando estés con tu familia, solo conviértete en uno con ellos y así entender lo que es mejor para ellos está claro. Solo así.

–Maestro Zen Seung Sahn